Un aroma seco de mediocridad y vileza que se desprende de aquellas cosas incapaces de reconocerse ya inútiles...
El eco ridículo de una carcajada. Rebufo de lo que se ansía, pero es imposible llegar a ser... Normal.
Una caricatura. Sí, una caricatura vergonzante de una escena lamentable en la que la única opción además de pudrirse, es seguir siendo basura...
No hay comentarios:
Publicar un comentario